Coordenadas
Mapa Topográfico Nacional a escala 1:50000. Hoja CALANDA. nº 494.
Localización del extremo septentrional de la Peña del Tormo (datos propios):
X (UTM, WGS 84): 721094
Y (UTM, WGS 84): 4530036
Ubicación y accesos
La "Chaminera" del barranco de las Palomas se sitúa a unos 600 m al Este de la torre de la Iglesia, en línea recta y salvando grandes desniveles.
El acceso más factible para tener una visión óptima de la "Chaminera" se inicia en la ermita de San Juan; desde allí se continúa por una senda poco nítida que serpentea entre los matorrales (aliaga, romero, tomillo, coscoja..) y que bordea la cabecera del barranco de las Palomas.
No es aconsejable tratar de alcanzar de este singular elementos del paisaje alcorisano porque se ubica en una ladera con una pendiente muy elevada y con rocas sueltas e inestables.
Descripción y génesis
(de Balcei nº 172, p. 76-77)
La cabecera del barranco es amplia y suavemente cóncava, se encaja de forma abrupta en los conglomerados generando un profundo escarpe que caracteriza el paisaje. Por debajo de los conglomerados, puede observarse una potente serie de más de sesenta metros constituida por lutitas y arcillas con intercalaciones de orden métrico de areniscas y conglomerados.
La combinación del escarpe abrupto que generan los conglomerados superiores, casi vertical en algunas zonas, con la planicie desarrollada en su cima genera los alcores, cerros de cumbre plana que circundan Alcorisa.
Las arcillas y lutitas, conocidas en Alcorisa como sallón, generan laderas inclinadas con pendientes que incluso pueden aproximarse a 45º.
La "Chaminera" del barranco de las Palomas es una columna de roca estratificada aislada por el efecto conjunto de diaclasas generadas por esfuerzos tectónicos y de la meteorización-erosión diferencial; en consecuencia, no es estrictamente una “chimenea de hadas” porque no se trata de una única roca competente o dura que preserva de la erosión al material homogéneo infrayacente, menos resistente a la erosión. Este elemento del paisaje podría denominarse como modelado turricular, forma turriculada o torre.
La forma turricular se dispone enhiesta a una distancia de casi cuatro metros de la pared conglomerática. Esta separación se ha producido por la ampliación de una grieta o diaclasa preexistente en los conglomerados por efecto de los agentes atmosféricos. La grieta es visible a unos 100 m hacia el norte, donde ha individualizado una gran roca alargada en la misma dirección y otra que está en proceso de individualizarse.
La “chaminera” del barranco de las Palomas alcanza seis metros de altura en su cara oriental y la conforma una sucesión de seis niveles o estratos con esta litología, de abajo hacia arriba: Arcillas y lutitas (sallón) / Conglomerados / Arcillas y lutitas (sallón) / Areniscas / Arcillas y lutitas (sallón) / Conglomerados.
El tramo superior, que está constituido por conglomerados mucho más resistentes que las arcillas, ejerce de protección de la estructura frente a los procesos de meteorización y de erosión.
Lo más interesante de la forma turriculada del barranco de las Palomas radica en el proceso de meteorización del sallón que, a la postre, será el responsable de su caída.
Las arcillas que constituyen el sallón son muy competentes en profundidad, cuando están englobadas dentro del macizo rocoso; en cambio, si afloran en la superficie del terreno resultan expansivas si se someten a ciclos de humectación y secado. Cuando el sallón se humedece, puede incrementar notablemente su volumen (se expande) y cuando se seca, se contrae. La repetición cíclica de este fenómeno agrieta la roca y la disgrega, lo que origina desprendimientos de bloques que pueden alcanzar un tamaño importante y, en consecuencia, la erosión se acelera.
Este particular proceso de meteorización que favoreció el modelado de la forma turriculada de Las Palomas, será la causa definitiva que acabe con ella a medio plazo. Los tres niveles de sallón que hay en la "Chaminera" contienen muchos bloques definidos que poco a poco se desprenden de la matriz; además, los niveles inferiores de sallón tienen menos extensión que los niveles de conglomerado suprayacentes, que en parte, ya están descalzados. Si cae el nivel superior de conglomerados que protege la estructura, simplemente perderá altura porque ese papel protector lo asumirían las areniscas infrayacentes, pero si se descalza el estrato conglomerático inferior porque el nivel de sallón más bajo reduzca aún más sus dimensiones por la meterorización, entonces se desplomará la estructura entera.
La destrucción de la “chaminera” del barranco de las Palomas será instantánea, por eso el Centro de Estudios Locales considera importante su documentación, puesto que se trata de un punto singular de nuestro patrimonio geomorfológico incluido dentro de la discordancia sintectónica del Calvario.
Puede parecer una afirmación alarmista, sobre todo si consideramos que lleva allí toda la vida, pero el proceso erosivo explicado sobre el nivel basal de sallón se ha acelerado en los últimos años.
Observaciones
(de Balcei nº 172, p. 76-77)
La forma turriculada de Las Palomas se distingue, perfectamente definida, en la imagen aérea en blanco y negro, a escala aproximada 1:32000, tomada en el vuelo realizado por el Army Map Service de EEUU en los años 1956-1957. No hemos podido constatar su existencia en las imágenes que se obtuvieron en un vuelo anterior porque hay sombras que impiden la observación del área.
Fotografía principal
La forma turriculada denominada "Chaminera" vista desde el Norte.
Galería de imágenes:
Fotos 1 y 2: Vista desde el Norte de la cabecera del Barranco de las Palomas con la "Chaminera". Al fondo se aprecia la ermita de San Juan.
Foto 3: La "Chaminera" vista desde el Sur.
Foto 4: Columna conglomerática aislada del macizo rocoso a causa de una diaclasa (grieta) ensanchada. Se ubica a unos 100 m al Norte.
Foto 5: Vista aérea del entorno del brranco delas Palomas y de la peña de San Juan.
Mapa:
